Adoptar determinadas pautas de comportamiento sirve tanto para protegernos a nosotros mismos como para preservar los recursos hídricos y evitar incendios forestales, cuya declaración y propagación se ve favorecida por las altas temperaturas.
Recomendaciones ante una situación extrema de calor:
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Limite su exposición al sol, permanezca en lugares protegidos del sol el mayor tiempo posible y manténgalos bien ventilados.
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Tenga en cuenta que, al entrar o salir de estos lugares, se producen cambios bruscos de temperatura que pueden afectarle.
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Tome comidas ligeras y regulares, bebidas y alimentos ricos en agua y sales minerales, como las frutas y hortalizas, que le ayuden a reponer las sales perdidas por el sudor.
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Vístase con ropa adecuada de colores claros, cubriendo la mayor parte del cuerpo, especialmente, la cabeza.
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Evite ejercicios físicos prolongados en las horas centrales del día.
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Interésese por personas mayores y enfermas próximas, que vivan solas o aisladas.
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Nunca deje a niños ni personas mayores en el interior de un vehículo cerrado.
¡Recuerda!
La prevención favorece su seguridad y conocer algunas pautas de conducta para la autoprotección ayuda a tomar las decisiones adecuadas.
Siga las recomendaciones específicas sobre sequía, ante una situación de escasez de agua, así como las correspondientes a la prevención de incendios forestales.
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